Jose Fernández Molina lleva media vida rescatando del olvido auténticos tesoros, incluso de lugares tan cercanos para todos como son los mercadillos. Los planos desaparecidos de La Alhambra o las memorias de un judío que era familiar de Albert Einstein son algunas de las joyas que este recuperador historico halló en el mercadillo de Benalmádena.
Tasador de obras de arte y perito arqueológico y caligráfico de profesión, J. F. Molina es desde bien joven un coleccionista nato. Eso sí, lo más valioso que tiene en su colección son los sueños cumplidos y el último de ellos es su primera novela: El Tasador de Antigüedades, que presenta en sociedad este martes 10 de octubre, a las 19.00 horas en la Casa de la Cultura, y que se puede adquirir a través de Amazón y en varias librerías de Benalmádena.
En este libro el lector se va a ver inmerso en un misterio que surge en la sala de arte griego del Museo Louvre y será John Fox, el tasador de antigüedades, quien lo guíe durante toda la trama en la que se ven involucradas historias de reliquias sagradas, órdenes místicas y secretos del Vaticano, en un enigma sin resolver que desembocará en un final totalmente inesperado.
J. F. Molina nos confiesa que lleva años trabajando en la novela. Y es que, que duda cabe que sentarse y empezar es el mayor obstáculo que se encuentra un escritor novel. “Llevo mucho tiempo con este proyecto en mente, hasta que un día me senté, empecé a escribir el borrador y poco a poco nació El Tasador de Antigüedades”, nos explica.
J. F. Molina tenía una historia que contar, que le entusiasmaba, solo necesitó explorar cómo quería contarla y lo hecho de forma magistral. La experiencia de escribir su primera novela, en la que ha impreso sus experiencias con el mundo de las antigüedades y conocimientos de historia bíblica, ha sido un proceso igual de intenso que apasionante. Entusiasmo en muchos momentos, impaciencia por acabar alguna de las tramas, frustración ocasional cuando algo “no le cuadra”, emociones a flor de piel en esos instantes especiales vividos por el protagonista de su libro, John Fox, han sido algunas de las sensaciones que le han acompañado durante estos años que ha dedicado a su opera prima.
“Con este libro se cumplió una frase que me dijo un buen amigo: Si llega un momento en el que el libro te habla en vez de tú a él, será un buen libro. Es curioso, me emociono incluso al contártelo, pero yo tenía una idea muy madurada, una línea cronológica prefijada, y cuando me puse a escribir el libro fue él quien eligió el final…”, nos confiesa.
En esta novela, la historia, la aventura y la ficción están tan bien hiladas que hasta engaña al lector más erudito, pues J. F. Molina ha introducido con maestría elementos ficticios, tan bien argumentados históricamente que hacen dudar, difuminando hasta el límite esa línea entre la realidad y la ficción. Hay capítulos en los que nos narra “su versión de la historia real no contada” y, como no podía ser de otro modo, también hay un guiño a Benalmádena a través del caballero templario de Benal, pero no podemos desvelar mucho más…
Con El Tasador de Antigüedades casi recién nacido, el escritor ya está inmerso en su segunda novela en la que John Fox también tendrá un papel protagonista, un personaje que aunque J. F. Molina reitere que “no es él”, tiene muchísimo de su creador, tanto en cuanto a conocimientos como a pasión… por compartir, por casualidad, incluso comparten las siglas de sus nombres y apellidos.
J. F. Molina continúa coleccionando sueños. Una afición que le viene desde que era un niño. A los 10 años soñaba con tener un traje de astronauta y a día de hoy puede presumir de contar con tres en su colección privada… soñó con ver su novela en las estanterías de las librerías y no solo lo ha logrado, sino que ya ocupa un lugar privilegiado en las bibliotecas caseras de cientos de lectores. J. F. Molina es un cazador de sueños, empeñado por ampliar su colección aunque sin prisas, pues tiene la sana adicción a esa sensación única e irrepetible que le proporciona cada nueva meta cumplida.
Este martes, a las 19.00 horas, en la Casa de la Cultura, nos hablará sobre El Tasador de Antigüedades, resolverá todas las dudas que le expongan los lectores y dedicará ejemplares de una novela, que en tan corto período de tiempo ya está causando sensación en el mundo literario.
