El altercado de este jueves entre un vendedor ambulante y agentes de la Policía Local ha provocado mayor control de esta actividad en zonas como el paseo marítimo, pero también ha despertado la necesidad de la comunidad senegalesa asentada en Benalmádena de dar su versión de los hechos.
El portavoz de la asociación de Senegaleses, Djibril Balde, ha lamentado las lesiones sufridas por los cuatro policías locales -de carácter leve, según el comunicado oficial-, y las del vendedor involucrado en el incidente, del que se desconoce en estos momentos su estado de salud.
Lo primero que ha aclarado Balde es que “no es cierto que una veintena de nosotros nos viéramos involucrados y eso lo puede verificar cualquier persona que estuviera allí paseando”. En este sentido, asegura que el desencadenante de lo acaecido fue que el vendedor, -que fue detenido-, pidió a los agentes que no le retiraran la mercancía y “al agarrar la manta, ellos le pegaron. Fue entonces cuando comenzó la trifulca en la que, este vendedor fue el único que se vio involucrado y tuvo contacto físico con los agentes, que mientras lo sujetaban, le dieron con las esposas en la cabeza causándole una herida. Lo que provocó que éste se revolviera y durante el forcejeo, dañase a los policías”.
Recalca que los demás vendedores solo se acercaron “para mediar al ver lo que estaba ocurriendo, pero de forma totalmente pacífica y no en los términos que están dando a entender”. Desde la asociación han solicitado una cita urgente al alcalde, Juan Antonio Lara, del que aseguran que “en campaña electoral nos dijo que nos apoyaba y ahora ni siquiera nos quiere recibir”.
“Por desgracia, no tenemos otra forma de sobrevivir y de mantener a nuestras familias que con la venta ambulante”, explica Balde, que critica que, “a través de la Aceb (Asociación de Comerciantes y Empresarios de Benalmádena), se nos prometió el acceso al mercado laboral a través de unos cursos con el apoyo de las Administraciones públicas, de los que a día de hoy no sabemos nada”. Es por ello que asegura no llegar a entender la intención del comunicado hecho público por la asociación de comerciantes de Benalmádena este viernes, en el que se expone que estas medidas “no están teniendo acogida”, cuando “Rosa -en relación a la presidenta de la Aceb- conoce perfectamente nuestra situación real y predisposición”.
Por otro lado, el presidente de la Asociación de Senegaleses en Benalmádena asegura que “desde hace unos meses se ejerce fuerza física hacia algunos de nosotros, cosa que antes nunca había ocurrido porque saben que somos personas pacificas. La policía siempre nos había pedido la documentación e incluso incautado la mercancía, pero sin hacernos daño y con una actitud de mucha humanidad”.
Según manifestó a este medio “nuestro deseo es que toda esta situación de crispación y tensión se calme lo antes posible por lo que reiteramos al alcalde, Juan Antonio Lara, que tenga sensibilidad con nosotros y que por favor nos reciba la próxima semana”.
Además de solicitar un encuentro con el primer edil, el viernes decidieron parar su actividad y hacer una sentada pacífica en el paseo marítimo.
