El Ayuntamiento va a gastar casi 50.000 euros en comprar banderas. Es cierto que desde que Juan Antonio Lara llegase a la Alcaldía de Benalmádena con mayoría absoluta del PP rara es la semana en la que no agasaja a quien visita la institución local con una bandera del municipio, además con dedicatoria personalizada incluida y firmada de su puño y letra. La bandera de nuestro municipio firmada, según ha manifestado el primer edil en numerosas ocasiones, se ha convertido en una especie de talismán que, en sus palabras, “da suerte” a quien la porta, pero parece ser que tanta “fortuna” ha repartido el alcalde en estos primeros meses de mandato que ya ha agotado las existencias de banderas en el Ayuntamiento y de ahí, este nuevo contrato por valor de 49.586,76 euros para que no falten banderas en dos años, según queda constancia en la documentación a la que ha podido acceder este periódico.
El líder de la oposición, el socialista Víctor Navas, ha sido quien ha sacado a la luz el ‘presupuesto banderas’. La inversión prevista en este menester incluso si se cambiasen todas las que ondean en los edificios municipales se torna excesiva, teniendo en cuenta que, según ha podido confirmar Ole Benalmádena, el precio de una bandera de Benalmádena con escudo tamaño 130×200 asciende a los 92,72 € y de 100×150 a 54,89 €. Solo hay que hacer las cuentas para comprobar que casi 50.000 euros dan para muchas banderas, pero muchas.
Al margen del gasto, que la oposición no entiende como necesario ni urgente, Navas solicitó en el pleno de hoy una regulación para el uso de este símbolo de nuestro municipio en el que quede especificado cuándo otorgarla pues “a lo mejor pudiera quedar para ocasiones especiales y en otras, ofrecer un obsequio que no suponga un coste tan elevado a la ciudadanía”.
En cuanto a la dedicatoria del alcalde en las banderas, tanto PSOE, como IU y VOX estuvieron de acuerdo en que “no es de recibo garabatear ni firmar sobre ella” e incluso Navas aludió a la legislación que regula el uso de la bandera de España y el de otras banderas y enseñas para argumentar que “no se puede escribir en nuestra bandera, pues lo que se hace es mancillarla” y que su uso “debe ser una decisión del plenario”, máxime teniendo presente el coste que conlleva el «detalle» para las arcas municipales.
IU-Podemos aseguró que “Juan Antonio Lara escriba en todas las banderas del municipio Con todo mi cariño, el alcalde… como si fuera un escritor que dedica su libro, suena muy mal” y VOX también se mostró de acuerdo en regular la entrega de este obsequio y su repulsa a que “ni el alcalde ni nadie garabatee o firme sobre la bandera de Benalmádena” y además, aludió a que Málaga precisamente tiene un reglamento al respecto, que pudiera orientar al que se crease en nuestro municipio.
La concejala de Deportes, Jesica Trujillo, no se pronunció en su turno de palabra sobre el asunto de las dedicatorias personalizadas del alcalde, Juan Antonio Lara, que no asistió al pleno por asuntos personales. La concejala popular solo indicó que “desde que llegamos al Gobierno mimamos a todos nuestros deportistas y queremos que vayan a las competiciones protegidos sentimentalmente con la bandera de Benalmádena”. En sus declaraciones debió olvidar al fútbol femenino, que esta abocado a la desaparición porque el Ayuntamiento no le proporciona campo para entrenar, entre otros clubes que adolecen de apoyo municipal. Pero es es otra historia pues la bandera de Benalmádena no solo ha servido como obsequio al área de deportes sino que, en los últimos meses, se ha generalizado indistintamente del sector al que pertenezca el agasajado.
La votación de esta moción del PSOE para regular el uso de los símbolos institucionales a través de la Ordenanza de Honores y Distinciones fue desestimada con los votos en contra del PP y a favor de toda la oposición, por lo que en breve llegarán al Ayuntamiento de Benalmádena miles de banderas nuevas, una curiosa inversión que costará a los benalmadenses la nada desdeñable cifra de casi 50.000 euros.