La sesión plenaria celebrada esta mañana ha dado luz verde de forma definitiva a las bases reguladoras del programa transitorio de captación de viviendas privadas no habitadas, destinadas al alquiler social en Benalmádena. La iniciativa ha contado con el voto favorable del equipo de Gobierno (PSOE e IU), PP y Cs, y el voto en contra de Vox.
El primer edil, Víctor Navas destacó que se trata de “proyecto ambicioso y pionero”, y que “pocos ayuntamientos están trabajando en esta línea”.
Navas expuso que “Benalmádena cuenta con una presión turística enorme, lo que provoca que los precios de la vivienda se disparen, impidiendo a muchas familias y jóvenes tener facilidades para acceder a una vivienda digna”.
Así las cosas, insistió en que, “en tanto logramos poner en marcha una oferta pública para la captación de suelo para impulsar la construcción de nuevas viviendas sociales, tenemos la obligación de impulsar medidas y políticas que contribuyan a facilitar el acceso a una vivienda digna a las personas con menos recursos”.
Dentro de esta línea de políticas de acceso a la vivienda, se enmarcan iniciativas como el programa de fomento del alquiler residencial frente al turístico, el reparto de ayudas económico-familiares y de emergencia desde Servicios Sociales para el pago del alquiler, y el lanzamiento de este nuevo programa de captación de viviendas, enumeró el primer edil.
La puesta en marcha del programa aprobado en el Pleno, facilitará la creación de una bolsa de viviendas en alquiler, que se pondrán a disposición de ciudadanos con dificultades para acceder a un hogar digno, con todas las garantías al propietario que puede ofrecer el Ayuntamiento.
De este modo, a los propietarios de viviendas que se sumen a este programa y las cedan para el alquiler social, el Ayuntamiento les pagará las rentas a un precio de 7 euros por metro cuadrado. Según fuentes municipales, se estima que la apertura del plazo para que los propietarios interesados en participar presenten sus solicitudes se producirá durante el próximo otoño.
Asimismo, el Ayuntamiento se comprometerá con cada propietario al pago de las rentas mensuales por un periodo de cinco años, “garantizando los suministros y la integridad de la vivienda”, ha explicado el alcalde.
“Se trata de una medida transitoria que ofrece una rentabilidad fija a los propietarios al garantizar el Ayuntamiento el pago del alquiler durante un periodo de cinco años, al tiempo que nos facilita tiempo para que hagamos acopio de suelo para la futura construcción de viviendas sociales”, ha destacado Navas.
Por su parte, el concejal de Vivienda, Pablo Centella, expuso que “es necesario establecer medidas como la que hoy llevamos a pleno, destinando una cantidad importante de dinero público para el fomento del alquiler social mientras seguimos trabajando en la captación de suelo para la creación de nuevas viviendas sociales”.
Las personas que accederán a esta nueva bolsa de viviendas serán seleccionadas por los trabajadores de Servicios Sociales y, según el concejal de Administración General, Sergio Torralvo, “será el propio Ayuntamiento el que garantice la renta mensual durante cinco años, así como el abono de suministros, tanto luz como agua”
Para tal fin, el programa dispondrá de una dotación presupuestaria de un millón de euros, “por lo que destinaremos 200.000 euros a cada una de las anualidades”, ha estimado Torralvo.
El Ayuntamiento, a través de sus técnicos municipales, podrá visitar en cualquier momento la vivienda alquilada para comprobar el estado de la misma, ya que el Consistorio también asumirá el compromiso de que la propiedad, una vez finalice el contrato de alquiler, se entregue en las mismas condiciones en las que se puso a disposición de la institución por parte del propietario.