Las guerreras benalmadenses conquistan Andalucía tras vencer por 2-1 a un gran club como es el Arenas de Armilla, que lleva cuatro años consecutivos clasificándose para la fase andaluza y que llegaba a la final con la portería invicta.
Las de Sergio Pérez no iniciaron este domingo con buen pie el partido, con un temprano gol en contra tras una errónea salida de balón, que le robó una delantera rival a Sara. Pero, antes de terminar la segunda mitad, una internada de Adriana concluye en falta al borde del área, donde una espectacular Ana Mesa protagoniza un gol imparable para la portera del Arenas de Armilla, logrando la igualada.
Minutos más tarde, una salida de balón de Lorena, que mueve nuestro equipo de lado a lado, termina en las botas de Carmen Peláez, quien con un magnifico tiro cruzado logra la ventaja para las benalmadenses justo un minuto antes de ir a vestuarios.
En la segunda parte del encuentro, ambos equipos pusieron toda la carne en el asador, pero según fueron pasado los minutos el devenir del partido fue demostrando la supremacía de las nuestras. Se vivieron momentos complicados tras la lesión de Lorena, pero las rivales no lograron ninguna llegada en la que Sara tuviera que invenir, y la ventaja del 2-1 se mantuvo hasta el pitido final.
La afición amarilla celebró por todo lo alto esta gran hazaña del Atlético Ben-namiel. Y es que, es un orgullo el hito conseguido por el conjunto dirigido por Sergio Pérez, que demuestra que los buenos resultados no solo dependen del presupuesto de un equipo sino que detrás hay mucho trabajo y corazón.
Un club sin presupuesto, sin campo municipal para entrenar a todos los equipos a los que hubiera podido dar cobertura, sin subvenciones ni grandes patrocinios, pero con muchas ganas y el trabajo de sus directivas y equipo técnico, se ha enfrentado a grandes equipos malagueños que llevan trabajando el fútbol femenino desde hace más de una década y que cuentan con un respaldo económico importante. Y si no fuera poco, ha luchado contra los más punteros de nuestra comunidad autonómica hasta erigirse como el mejor.
Las guerreras de Benalmádena se dejan en el césped hasta el último aliento desde el primer minuto al final. Y esa lucha incansable, ese siembra para recoger, hacen que se hayan convertido en el orgullo de Benalmádena, en las mejores de Málaga, ahora también de Andalucía y en el espejo en el que se miran muchas niñas que sueñan con jugar al fútbol y defender el escudo de un club que en solo dos años de vida, ha escrito con letras doradas el nombre de nuestro municipio en la historia del fútbol femenino andaluz. ¡Ya somos de Tercera!