El Gobierno de Benalmádena ha cambiado el ‘look’ de los operarios municipales, que desde hace unos días estrenan nuevo uniforme, dejando atrás el tradicional amarillo fluorescente por un tono naranja con la incorporación del polémico nuevo logotipo del Ayuntamiento, que tantas mofas ha protagonizado en medios de comunicación nacionales y redes sociales.
La renovación de la estética del vestuario, que se ha hecho coincidir con el cambio a la vestimenta de verano, ha provocado las críticas del PSOE, que lo ve como un “antojo” del alcalde, Juan Antonio Lara, que deja inservibles los anteriores uniformes para “imponer su marca corporativa con una estética desfasada más propia de los 90”.
Según los socialistas, se trata de otro “gasto superfluo”, que en este caso asciende a 200.000 euros que, “sumados al resto de gastos para la implantación del nuevo logotipo, suponen 500.000 euros pagados con los impuestos de todos los benalmadenses para satisfacer el ego del alcalde, que se ha empeñado en que su marca personal luzca ahora incluso en la ropa de trabajo de los empleados públicos”.
El líder de la oposición, Víctor Navas, subrayó que cada vez que el Ayuntamiento ha renovado el contrato de uniformidad, se ha respetado el color (amarillo) y diseño, entre otros motivos, para que “los trabajadores pudieran renovar sus uniformes y a la par, mantener los antiguos en uso mientras estuvieran en buen estado”.
¿Estatua de Amazon?
Por otro lado, la concejala socialista y secretaria de Organización, Isabel Ruiz, ha denunciado que el Gobierno de Juan Antonio Lara ha colocado en la rotonda ubicada en la confluencia entre Blas Infante y Herrera, una estatua creada en serie y sin autoría, que “cualquier persona puede comprar en Amazon”.
A juicio de la socialista “éste es otro ejemplo de la política del PP de Benalmádena, basada en el artificio y no en las prioridades reales del municipio” y aludió a la compra de macetas de flores de plástico, el pintado del césped natural en Benalmádena costa o la apuesta por el artificial en los tres núcleos poblacionales del municipio.
La escultura representa a un niño leyendo y, según anunció el alcalde es “un homenaje al papel y su contribución a la educación y cultura más allá de nuestro municipio, destacando la importancia que tuvo para Arroyo de la Miel como cuna del papel en la Costa del Sol”.
En palabras de Ruiz, “tergiversan la historia pues la Costa del Sol es una comarca moderna, nacida a mediados del siglo XX. Y en Arroyo de la Miel nunca se fabricó papel, lo que se producía en el siglo XVIII era pasta de papel, que luego se enviaba a Macharaviaya, donde se fabricaban los célebres naipes de Félix Solesio, verdadero fundador de Arroyo de la Miel”.
“Esta es la ciudad que nos quiere vender el señor Lara: césped artificial, flores de plástico y muñecos de Amazon”, ha denunciado la secretaria de Organización.
La oposición en bloque viene denunciando que el Gobierno local de Benalmádena “está gastando de forma descontrolada” dinero público de las arcas municipales para gastos que califican de “superfluos”, mientras recorta en servicios básicos en el municipio.
Entre las compras más polémicas se encuentran los casi 50.000 euros en banderas, que, entre otros, se vienen usando como obsequio una vez son dedicadas y firmadas por el alcalde; la adquisición de una cafetera de casi 500 euros para Alcaldía; los 11.788,50 euros en el tapizado de sillas y butacas; 161.215,72 euros en flores y macetas de plástico, la subvención directa nominativa de 4.119,80 euros al Obispado para reparar el reloj de la parroquia de Santo Domingo de Guzmán de Benalmádena pueblo “sin ni siquiera conocer previamente cuánto cuesta el arreglo”; los gastos en catering de 5.000 euros y comidas por 6.000; el pago de 6.037,90 euros en cuatro facturas a un asesor externo por un informe de medio folio con faltas ortográficas; los gastos en rotulación de vehículos con el polémico nuevo logotipo municipal, 5.953,2 euros en abanicos azules; 5.808 euros en placas firmadas por el primer edil o la compra de retratos del Rey Felipe VI al Palacio Real, son algunos de los variopintos gastos que han salido a la luz pública en lo que llevamos de legislatura.